El pasado domingo por la mañana en Denia se enfrentaba el filial del conjunto local contra el Racing en uno de los partidos correspondientes a la duodécima jornada de liga en primera regional.
El Racing con un gran número de bajas en sus filas viajó hasta Denia con el objetivo de intentar sumar algún punto, pero aunque la actitud mostrada en el campo fue muy buena, el Denia aprovechó sus oportunidades y se hizo con el encuentro.
En la primera parte el equipo local se volcó al ataque mientras que el Racing esperó atrás y aprovechar alguna contra para sorprender al Denia, y no tardó nada en llegar la primera ocasión para los visitantes, ya que en una jugada en la que Andreu arranca en posición legal y que el colegiado se equivocó señalando fuera de juego, que los mismos espectadores de Denia no podían creérselo. Más tarde llegaría otra jugada polémica en una falta inexistente señalada por el árbitro en un saque de esquina de Feme. Pero al final la fortuna sonrió al conjunto local después de que defensa y portero no se entendieron y facilitaron el remate del delantero local en el minuto 44. Con el resultado de 1 a 0 se llegaría al descanso.
En la segunda parte, el Racing lo intentó pero no conseguía crear peligro mientras que el Denia en una buena jugada se interna por banda izquierda y centra para que el delantero suba el segundo gol al marcador. Todo pintaba mal para los de Rafelcofer aunque sacaron la casta y no agacharon la cabeza en ningún momento y siguieron intentando llegar a la portería contraria y en una gran jugada, Joan remata al palo y luego Ximo a puerta vacía no consiguieron acortar distancias que hubiesen cambiado el rumbo del partido. Pero al igual que en la primera parte el colegiado no estuvo acertado y no pitó un claro fuera de juego que supuso la sentencia para los de Denia.
Aunque este partido se haya perdido, hay que quedarse con la gran actitud y esfuerzo que han mostrado los jugadores y las ganas que se tienen de hacer las cosas bien. Ahora hay que luchar para que los próximos tres puntos se queden en casa para mantenerse en la mitad tranquila de la tabla y afrontar el próximo año con más fuerza que nunca y cerrar un 2008 de historia para todo el Racinguismo.